Ignacio

Planes, bellos planes…
Hoy quizás, se abre una flor…
Daré las gracias por todo lo bello que me han entregado…
Hoy quizás no te extrañe…
Y reiré por todo lo que pasamos juntos, como una loca por las calles de Santiago…

Buscaré desesperada un cigarro suelto que comprar…
Hoy quizás si las ganas me comen las manos, lo encenderé con ansias…
Esperaré despertar con la aurora, abrir los parpados con tu sonrisa.
Hoy quizás encuentre un teléfono público que llame por 100 a celular…
Y despierte otra vez con el amanecer en mis hombros y tus manos morenas de historia en mi estomago.

Mañana cerraré los ojos agradeciendo a la tierra y saludaré a las hojitas de mi parrón.
Hoy imaginare la manera más sensata de decir que no quiero mentirte jamás
Mañana sabré lo que dirás en respuesta
Hoy instauré tu nombre en mi norte
Sobre ti plante mi descendencia, dormirás con tu cabeza en mi estomago.

Ayer miramos las estrellas con el mar a nuestros pies
Fuimos América latina libre en las estrellas, descubrimos sus ríos y sus selvas…
Descubriendo nuestros problemillas atencionales…
Ayer vi tu madurez echa fruta, sentidos de vino en nuestras bocas
Sentimos la arena caliente en nuestros pies, el mar rompiendo en nuestros oídos…

Dormiremos en la mañana y despertaremos en la noche…
Reiremos a carcajadas por nuestras penas
Y lloraremos cada vez que nos sintamos felices
Nos abrazaremos cuando estemos lejos
Ayer estuviste navegando entre mis sabanas citadinas…

Tu aire nortino abrió las escalas de mi objeción
Tu piel morena invadió mi historia y la hizo leña para el fuego
Risas de niños nos despertaran a media noche
El crujir de la cama que bailó al compás de nuestro navegar
Te enredaste en la funda de mi cojin, y yo aun no saco la arena de mi frente

No sacare la mano de mi cabeza, para que el sol me deje ver
No dejare de mirar ni norte instaurado en la arena
No dejare de sentir la sal de mis brazos, y no sacare tu corazón de mis oídos
Reviviré para ti, solo para verte caminar y ser feliz
De nuestra fé saldrá un nuevo mundo, lleno de respeto, ríos, lagos y estrellas

Y me dirás como dices siempre: mi amor te amo y otro mundo es posible.